ENFERMEDADES QUE HEMOS TRATADO CON ÉXITO

Algunos casos tratados con campos electromagnéticos pulsatiles de baja frecuencia extrema EIMA.

J.L.G.R. masculino de 48 años de edad, acudió a la terapia EIMA por depresión y trastornos somáticos por estrés, entre los que se encontraban contracturas musculares y gastritis.

Desde la primera sesión su estado de animo cambió, su sueño fue mejor y a la tercera sesión nos reporto la desaparición de las contracturas musculares y gastritis, lo que le permitió reintegrarse a sus actividades productivas con toda su capacidad.

M.A.H.M. masculino de 62 años de edad, acudió a la terapia EIMA por secuelas en ambos pies de accidente automovilístico. Estas consistían en dolor neurótico y edemaque impedían la marcha. Se recomendó la terapia EIMA, para resolver el dolor neurótico, por lo que se sometió a seis sesiones con frecuencia de dos veces por semana.

A la primera semana el dolor había disminuido, y sorprendentemente lo mismo paso con el edema. Al final de sus terapias se encontró que su marcha es mucho mas fácil y menos dolorosa, y desde luego, sin el edema subsecuente.

A.R.P.J. masculino de 37 años, con Esclerosis Múltiple, diagnosticada cuando el tenia 26 años. Atendió a nuestra terapia por espasticidad importante del hemicuerpo derecho, con la atrofia muscular concomitante.

Se le aplicaron sesiones de dos horas en número de 10, con lo cual se corrigió la espasticidad en un 80%, con lo cual su movilidad regreso a todo su hemicuerpo.

A:H: Femenino de 12 años de edad, llega con diagnóstico de Leucemia Linfoblástica, tratada con quimioterapia múltiple. Al iniciar el tratamiento sus reportes de laboratorio muestran que sus leucocitos son 1200 y sus plaquetas 65000, hemoglobina de 9g. Su estado general estaba muy deprimido, a pesar de tener todos sus signos vitales dentro de la normalidad. Presentaba astenia y adinamia, falta de apetito y un talante deprimido.

Acudió a la primera sesión de terapia EIMA un día antes de su quimioterapia, tanto los padres como su médico tratante esperaban encontrar las cifras de laboratorio aún más deprimidas, sin embargo las plaquetas subieron a 110000 y los leucocitos llegaron a 2600, en esa ocasión. Continua acudiendo a su terapia, con mucho mejor estado general, a pesar de estar recibiendo quimioterapia, ahora mas agresiva, su talante se volvió mas animoso y sus cifras de control llegaron prácticamente a limites normales. Leucocitos entre 3,600 y 4,000 plaquetas 250,000 y el nivel de hemoglobina no descendió por abajo de 9 g/dl, por lo que requirió de transfusiones sanguíneas en el periodo que fue atendida con la terapia EIMA. Continuo su tratamiento por 10 semanas, asistiendo dos veces por semana, independientemente de su tratamiento con quimioterapia. A la fecha sigue en remisión.

M.E.G., femenino de 29 años, con diagnóstico de Esclerosis Múltiple, que había estado padeciendo por mas de 10 años, llevaba 4 años sin poder levantarse de la silla de ruedas debido a la espasticidad y debilidad de sus miembros inferiores.

Inicio tratamiento, mejorando de manera sorprendente su espasticidad y movilidad de miembros inferiores. En octubre de ese mismo año, se podía levantar sola e iniciaba ejercicio en bicicleta fija. (atendiendo 1 vez por semana a EIMA).

Se decidió darle 6 sesiones consecutivas (diarias) de terapia EIMA, y la espasticidad disminuyó aún más, de tal manera que se pudo parar sola y caminar.

Nota.- En relación a EM hemos tenido alrededor de 20 pacientes en los últimos 5 años, y en todos los casos han existido mejorías, semejantes a la ilustrada en el ejemplo citado.

M.P. masculino de 77 años, con diagnóstico de Diabetes Mellitus, enfermedad cerebro-vascular e hiperlidemia. A pesar del tratamiento a base de hipoglicemiantes orales y estimulantes de la circulación cerebral, Don M. persistía presentando frecuentes episodios de vértigo, así como trastornos en la memoria e hiperglicemiaprácticamente constante.

Recibió la primera sesión de terapia EIMA con glicemia de 350 mg/dl, colesterol de 320mg/dl y vértigo constante, lo que no le permitía hacer una vida normal. Después de la sexta sesión, sus niveles de glicemia habían bajado a 120mg/dl, el colesterol a 180 mg/dl y los episodios de vértigo, así como los trastornos de memoria habían desaparecido. Mientras estuvimos en contacto con el continuó su buen estado de salud, con niveles tanto de glicemia como decolesterolemia en niveles normales, y prácticamente sintomático de su ECV.

Nota.- En el tratamiento de diabetes Mellitus, los resultados presentados en este ejemplo, son representativos de alrededor de solo el 50% de los casos.

A.R.V.L. Femenino de 4 años de edad, con diagnóstico de dislalia secundaria ainmadurez cerebral. Acuden los padres con la niña que no podía articular ni una palabra. Presentaron EEG y TAC, donde se apreciaba en el EEG inmadurez difusa de SNC.

A lo largo de las primeras seis sesiones (una por semana) la paciente empezó a articular palabras completas. Continuo acudiendo a su terapia una vez por semana por cuatro meses con logros no esperados en su lenguaje.

V.U. Femenino de 24 años, con diagnóstico de CUCI (Colitis Ulcerativa Crónica Inespecífica) de cuatro años de evolución, había sido tratada con mutiples medicamentos, incluyendo corticoides, sin tener éxito en el tratamiento. Inició su tratamiento EIMA , recibiendo terapia una vez por semana.

La sintomatología clínica desapareció después de la segunda sesión, con modificación de las heces fecales. A la fecha  se encuentra asintomática. Habiendo dejado por completo la ingesta de corticoides, (gradualmente) para la cuarta semana, con los subsecuentes beneficios a su estado general.

Dr. D.U.B. Masculino de 66 años, con diagnóstico de Diabetes Mellitusehipercolesterolemia. Al momento de acudir al tratamiento EIMA, no se había podido controlar ni su glicemia ni su hipercolesterolemia, a pesar de las dietas y medicamentos hipoglicemiantes.

Acudió en seis ocasiones a la terapia EIMA (una cada dos semanas), notándose una disminución en los niveles de glicemia y colesterol. Por dos años continuo, su glicemia controlada y sin medicamentos. Sus niveles de colesterol también estaban en sus limites normales.

E.L.R., Femenino de 22 años. Diagnosticada con Artritis Reumatoide desde los doce años de edad, con crisis recurrentes de artritis, que impedían el movimiento totalmente, valores de FR hasta de 400 u. Se sometió a tratamiento EIMA en siete ocasiones, y salió de una crisis de AR, desapareciendo totalmente la síntomatologia clínica y recuperando la movilidad articular en su totalidad al final de la terapia. (seis semanas, siete sesiones).

Esta paciente sigue asintomática, a esta fecha, con controles de laboratorio negativos y sin medicamento alguno. Regreso en dos ocasiones en las que recibió la terapia dos veces en cada instancia. Termino su carrera, y nos ha acompañado como testimonio en programas de televisión.

Nota.- En el tratamiento de Artritis Reumatoide, este es un caso excepcional, por lo rápido que se dio el alivio, pero en general en un promedio de 20 sesiones se logran resultados importantes, disminuyendo los dolores y los sintomas en general para un 90% de los pacientes, que para esta patología han sido alrededor de 75 personas.

K.H. Femenino de 27 años, con diagnostico de neurodermatitis de nueve meses de evolución presentando manchas hipercromicas, eritematosas en cuello, pliegues mamarios y brazos, ocasionándole prurito intenso; además estrés, depresión e insomnio. Se recomendó la terapia EIMA, por lo que se sometió a seis sesiones consecutivas, una por día, continuo con dos sesiones por semana por dos semanas. Desde la segunda sesión disminuyo el prurito y la hipercromía de las manchas, mejoro su estado de ánimo, su sueño fue mejor; a la décima sesión desapareció el prurito y las manchas; su piel ahora es suave, se siente tranquila duerme muy bien, buen estado de animo, recupero su autoestima.

S.G.V. femenino de 56 años, se diagnosticó Artritis Reumatoide del tipo juvenil,habiendo cursado con dolor e inflamación articular en manos rodillas y hombros. Tras varios intentos de diagnóstico, al fin llegó con un reumatólogo capaz de establecer el diagnóstico preciso. La ARJ es de origen inmunitario, por lo que el tratamiento que se estableció, fue a base de Aralén, medicamento que se usa en el paludismo, pero que es muy útil en esta enfermedad, aunque le lleve cerca de tres meses para iniciar su efecto.

Una vez diagnosticada acudió con nosotros para recibir la terapia electromagnética EIMA, logrando remisión del dolor prácticamente desde la primera sesión. Acudió a la terapia por 10 semanas (una vez por semana), al cavo de las cuales el dolor había desaparecido prácticamente al 100%.

A.J.M. masculino de 54 años. Acudió, debido a un accidente vascular cerebral, que requirió trepanación para retirar un hematoma, quedando como secuela hemiplejía y falla total de control de esfínteres. Su capacidad de comunicación estaba sumamente disminuida, con un estado depresivo aparente.

Después de la segunda sesión de tratamiento EIMA, se reporto menor espasticidad en miembros derechos, con lo cual su terapia física resulto mucho mas fácil. Al final de su tratamiento de 5 sesiones (una por semana), articulaba palabras y su comunicación con el medio había mejorado, pudiendo inclusive, expresar sus emociones.

P.S.C. masculino de ocho años. Autista. Se intento su tratamiento debido al componente inmunológico de la enfermedad, el cual se logro mejorar de una forma importante. Esto llevo a un efecto en cascada, por medio del cual hubo mejoría en todos niveles, logrando una mejor comunicación con el medio ambiente y con las personas de su alrededor.

M.C.T. femenino de 47 años, con diagnostico de Artritis Reumatoide, con deformidad de articulaciones de manos y rodillas, lo que impide la marcha normal, así como el trabajo manual, a menos de que realice un gran esfuerzo.

Acudió en forma regular a recibir la terapia EIMA, hasta que se logro disminuir el dolor, que no se había logrado a pesar de estar tomando prednisona, aralen, metrotexate y antiinflamatorios esteroides. Acudió una vez al mes para controlar su dolor, con lo cual ha aumentado su marcha y capacidad de trabajo en forma importante.

M.J.Z.A. femenino de 38 años. Acudió a nuestra terapia por una artritis reumatoidede 20 años de evolución, la cual había evolucionado con un incremento del dolor articular que no había cedido con muchos medicamentos tradicionales. Había recibido también fisioterapia tratando de mejorar sin lograrlo.

Inicio su tratamiento, con lo que su dolor comenzó a disminuir. El dolor más importante siempre fue en su hombro derecho, lo que le impedía realizar movimientos que cualquier persona puede hacer. A las cuatro sesiones (una por semana), el dolor del hombro disminuyó de tal manera que ahora es capaz de realizar prácticamente cualquier tipo de labor sin dificultad. Asistió a un total de 25 sesiones pues era el único eficaz para disminuirle el dolor.

D.G. masculino de 43 años con diagnóstico confirmado de Miastenia Gravis dos años previo al inicio de nuestra terapia. Cada vez que tenía una crisis de la enfermedad, se sentía condenado a dejar de trabajar por espacios de seis o mas meses , a pesar de los tratamientos masivos a base de corticoesteroides.

En enero de este año tubo conocimiento de la terapia EIMA, , por lo que acudió y recibió diez estimulaciones electromagnéticas, (dos por semana) con lo cual su crisis remitió, logrando evitar la fatiga muscular prácticamente desde las primeras sesiones.

Dr. A.N.M. masculino de 39 años, acudió con nosotros por tumor de laringe, el cual para permitir la respiración, requirió de traqueostomía. Al iniciar el tratamiento había una gran inflamación en el área del tumor, lo que dificultaba la deglusión de alimentos, existía además infección del sitio de traqueostomía, lo que hacia aun mas difícil su manejo. Al iniciar su terapia, presentaba además depresión y trastornos del sueño.

Conforme fue avanzando su terapia, la inflamación fue cediendo, el absceso e infección de la traqueostomía se pudieron controlar y disminuyo el tamaño del tumor, lo que era evidente a la palpación, con lo que mejoro su deglusión y su estado general.

A.M.H. femenino de 33 años, con antecedente de esplenectomía a los tres años de edad y 9 años de evolución de Lupus Eritematoso Sistémico, con manifestaciones hematológicas durante las crisis, que fue tratado con prednisona. En febrero del 2001 inicia crisis con alteraciones vasculares, trastornos en la tensión arterial que le imposibilita realizar el mínimo esfuerzo como caminar y comer y alteraciones hematológicos como plaquetopenia y anemia que se trata inicialmente con pulsos de prednisona, iniciando con 50 mg diarios y disminuyéndola paulatinamente pero sin poder controlar la crisis, también se administra tratamiento homeopático pero los trastornos continúan por lo que se inicia terapia con EIMA respondiendo en forma favorable inmediatamente se aplica cada tercer día el primer mes y posteriormente se van separando las sesiones y al mes y medio de tratamiento la paciente regresa a sus actividades habituales y sus laboratoriales se encuentran en valores normales, para este entonces se ha retirado el uso de corticoesteroides y sólo se mantiene la homeopatía y EIMA y a pesar de enfermedades infecciosas ocasionales o exposiciones al sol la paciente se ha mantenido estable y el lupus no se ha activado a la fecha.

A.B. masculino de 55 años, con diagnóstico de Cáncer de cabeza de páncreas. En principios se le realizo una laparatomia exploradora, debido a que presentaba un cuadro de obstrucción de vías biliares. En el transcurso de la cirugía se detecto el tumor, y se dio por terminada, ya que no se podía extirpar. El cirujano pronosticó una sobrevida corta, de escasos meses con un deterioro importante de su estado general.

A partir de la tercera semana de ese mismo mes acudió a recibir la terapia electromagnética EIMA, dos veces por semana, conservándose el estado general sin deterioro, y sin presentar sintomatología alguna. Se realizaron estudios complementarios de laboratorio, donde se investigo la actividad tumoral, encontrando que el antígeno carcinoembrionario, que es uno de los principales indicadores de la presencia de esta actividad, así como el resto de estudios tomados, estaban dentro de los limites normales. Conservo su capacidad de trabajo y su buen estado general, acudiendo a la terapia una vez por semana, después  dejo de acudir, perdimos contacto con el.

Nota.- Hemos trabajado como gabinete de servicio terapéutico, para el Hospital Azucarero, desde 1992 hasta la fecha habiéndose tratado pacientes de cáncer previo y post quimioterapia o radiación ionizante, a la fecha seguimos recibiendo estos pacientes y se han tratado alrededor de 300 de ellos. El objetivo logrado es el disminuir la depresión del sistema inmune.

E.G. Masculino de 62 años, con diagnostico de depresión estrés e insomnio de dos meses de evolución acudió a tres sesiones de EIMA, una por semana.

Desde la primera sesión reporto, que ya pudo dormir, mejoró su estado de animo, se sintió relajado, cuando acudió a recibir su tercera sesión (después de una semana de haber recibido la segunda) reporto ya dormir bien, buen estado de animo, lo que le permitió reincorporarse a su entorno social y labora, se le dio de alta.

I.S. Masculino de 35 años con epilepsia diagnosticada hace 21 años, durante los cuales recibió tratamiento medico sin lograr un completo control de sus crisis, que continuaron en un promedio de dos crisis por mes.

Acudió a las terapia EIMA en forma regular, una exposición a campo electromagnético EIMA de 45 minutos por sesión, semanalmente por 15 sesiones; a partir de la tercera sesión no volvio a presentar crisis.

D.M.A.R. femenino de 5 años con diagnostico de retraso de desarrollo psicomotor,trastornos de movimiento (Extrapiramidal) y secuelas neurológicas por hipoxia perinatal alergias respiratorias.

Acude presentando hipoxia muscular que le ocasiona trastornos de coordinación al caminar, movimientos involuntarios en extremidades, agitación convulsiva y desordenada del tronco que le dificulta mantener posición erecta (erguida), lentitud del pensamiento y del habla (bradipsiquia).

Recibió 10 estimulaciones electromagnéticas (EIMA), una por semana, mostrando cada vex mas importantes mejorías a partir de la segunda sesión, la madre refiere, menos cansancio, mejoró el lenguaje, camina erguida, más activa, marcha sin tropezar, no se han presentado alergias respiratorias, aumento su estatura.

K.V.V.O. Femenino de 10 años, con diagnostico de hiperplasia intestinal por células dañadas, reflujos gastrosofágicos, y estreñimiento, falta de apetito, dolor abdominal —por distensión—y nerviosismo por estrés provocado por el dolor—se come las uñas—, que no le permite un sueño reparador, esta sin energía, a pesar de habérsele practicado cirugía abdominal a los seis años tres meses de edad, que solo disminuyo el reflujo (los vómitos).

Recibe 10 estimulaciones EIMA—una por semana—disminuye el dolor y el reflujo, mejora el apetito, evacua normalmente, no se “muerde las uñas”, se siente con más energía.

Al término de 20 sesiones, desapareció el dolor y la distensión abdominal, los reflujos, se corrigió el estreñimiento, aumento peso y talla, se interesa por su apariencia personal y es una excelente alumna.

 J. R. CH. Masculino de 40 años con diagnostico de colitis ulcerativa crónica no obstructiva de tres años de aparición, durante los cuales recibió múltiples medicamentos, sin resolución a su problema. Acude a nuestra terapia con distensión abdominal, dolor, evacuaciones con sangre, nerviosismo e insomnio. Se sometió al protocolo de 20 terapias metabólicas, consistentes en estimulaciones electromagnéticas y ozonoterapia por insuflación rectal.

Desde la segunda terapia reporto estar más relajado, pudo dormir, sus evacuaciones son normales, disminuyo la distensión abdominal y el dolor.

A la fecha, mantiene buen estado de animo, sueño profundo, más energía actualmente asintomático y satisfecho de la terapia que ahora usa ocasionalmente.