Se tiene aceptada la teoría de que la enfermedad resulta de la agresión de anticuerpos, contra células saludables.  Los anticuerpos son proteínas del sistema inmune producidas en respuesta a la presencia de sustancias extrañas potencialmente dañinas que pueda ser una amenaza para el organismo: como químicos, partículas de virus, esporas o toxinas de las bacterias. Cada tipo de anticuerpo es único y defiende al organismo de un tipo específico de elemento potencialmente dañino. Pero si se da un “error” aparece una agresión contra el propio cuerpo y entonces tenemos una enfermedad autoinmune.

El lupus es una enfermedad es considerada autoinmune. Se le considera crónica, por algunos especialistas aunque se conoce de muchos casos de “remisión espontánea” o como resultado de nuestro tratamiento.

El lupus puede causar daños prácticamente en cualquier área del cuerpo. Causa inflamación y sus síntomas hacen que con frecuencia sobre todo al principio de la enfermedad, esta sea confundida con artritis.

El estrés es un muy bien identificado disparador de enfermedades autoinmunes. Las crisis y exacerbaciones  que caracterizan a los desórdenes autoinmunes corresponden con periodos de estrés psicológico. En estudios realizados a pacientes de enfermedad de graves (enfermedad autoinmune) se apreció que el estrés psicológico causado por el duelo es un disparador significativo de la crisis en esa enfermedad.

Nuestro tratamiento está encaminado  a modular el desempeño del sistema inmune al mejorar la replicación, transducción y traducción de la decodificación del ADN, con la aplicación del campo electromagnético producido por el Estabilizador Inductivo Magnético (EIMA), ozonoterapia por insuflación rectal, auto hemoterapia con sistema de vacuna indolora que contiene apitoxina, este tratamiento se inicia aquí en nuestro centro y se continua en su casa por un año, en ocasiones el tratamiento resuelve en mucho menos tiempo. Para hacer cita llame en horas hábiles a: 811-18-61 y 811-29-65